La Gracia y Autoestima

Descripción de la publicación.

3/9/20242 min read

Muchos de nosotros pueden pensar que estamos fuera de ese estado de bienestar y plenitud, la gracia es un estado de la existencia, y sin embargo pensamos que estamos fuera de ella.

¿Qué es la gracia? Es un estado de gozo, de alegría y de disfrute, es el estado de estar presente, aquí y ahora, y forma parte de la Autoestima, la Autoestima es el"silencioso" de respeto por uno mismo, pues sólo si me respeto, puedo aprender a aceptar y respetar a los demás.

Desgraciadamente esta búsqueda de bienestar y plenitud está centrada en elementos externos, es decir que buscamos afuera lo que en realidad debemos buscar dentro, es preciso Volverse hacia nosotros mismos, hacia el ser que te habita, hacia lo que estamos destinados a ser.

Es importante reflexionar sobre cómo las palabras y acciones de nuestros padres nos han impactado y, si es necesario, trabajar en desaprender creencias limitantes y construir una autoestima saludable a partir de nuestras propias experiencias y valoraciones.

La autoestima habita dentro de tus creencias, además responden a cómo te hablas a ti mismo, y como te percibes y como te ven los demás, quizá no somos responsables o no nos sentimos responsables de cómo nos ven los demás, sin embargo, si eres adulto, entonces debes hacerte responsable de cómo te ves a ti mismo, como te percibes, cuando amor te tienes, tenemos la posibilidad de redefinir nuestro futuro y la manera como queremos vivir.

De manera honesta debemos volver los ojos hacia uno mismo, para descubrir y aceptar lo que se halla oculto en nuestro ser y poder abrazarlo e integrarlo así sea positivo o negativo, es el camino para establecer una relación positiva con nosotros mismos, tomando conciencia de nuestras emociones y encontrar la mejor manera de expresarlas y manejarlas sin buscar hacer daño o hacerse daño, sin culpar ni culparse. Se trata de valorar todo aquello que nos lleve a sentirnos más orgullosos de ser quienes somos, de ser uno mismo. Quien soy ahora, merece todo mi respeto, valorando lo que tienes, porque si no lo valoras nunca valoraras lo que no tienes.

El conocimiento de ti mismo está vinculado con la

estimación y el respeto, así que en la medida en que más me aprecio, me cuido, me conozco y me estimo, puedo respetarme más profundamente.

Gozamos del libre albedrio como especie, además tenemos la responsabilidad y el talento o DON, la dicha y la necesidad de trabajar con nuestras creencias, la capacidad de elegir nuestra realidad personal de la forma que deseas.

El estado de gracia siempre está ahí, latente en nosotros, tú puedes elegirlo, aceptarlo, integrarlo intelectual y emocionalmente.

El mal básicamente no existe y esto no significa que te encuentres con efectos que te parezcan malos, pero a medida que vallas trabajando tu autoestima, tus tensiones, tus culpas y miedos vas a ir moviéndote a través de las dimensiones de tu propia consciencia y comprenderás que los opuestos aparentes son diferentes caras del único impulso supremo hacia la creatividad y evolución.

Es fundamental recordar que somos seres únicos, valiosos y dignos de amor y respeto, independientemente de lo que nos hayan hecho creer en el pasado.